
El depósito controlado de Residuos Sólidos Urbanos (RSU) de Colmenar Viejo es un moderno complejo de gestión de residuos que atiende a una población de 530.000 habitantes de 81 municipios, en los que se generan unas 950 toneladas al día.
Aprovechar las miles de toneladas de residuos orgánicos que desechamos para transformarlas en una fuente de energía es un proyecto que empieza a tomar fuerza en la Comunidad de Madrid. Los cuatro depósitos controlados de RSU que gestiona la Administración regional producen anualmente 192.000 megavatios-hora a partir del biogás, electricidad suficiente para abastecer a 37.500 viviendas.
Colmenar Viejo se ha unido a esta idea con la inauguración, de la planta de biogás ubicada en el vertedero municipal, ayer 14 de marzo.
Gas contaminante aprovechado.
Con esta instalación se consigue el doble objetivo de aprovechar el material que tiene en el vertedero su destino final y reducir las emisiones a la atmósfera de los gases de efecto invernadero generados en la descomposición de estas basuras.
La nueva planta, que ha supuesto una inversión de cuatro millones €, cuenta con la tecnología necesaria para evitar la emisión de ruido y de gases no aprovechados, permitirá abastecer de electricidad a más de diez mil hogares de la región.