El Boalo profesa gran devoción a San Isidro como Patrón de los ganaderos y agricultores, gremios a los que pertenecían la inmensa mayoría de sus habitantes antiguamente.

Hay una Ermita que es el reflejo de la devoción los habitantes. Situada al pie de la Peña Mediodía, y junto al área recreativa ecológica del mismo nombre, se celebra la Romería tradicional en honor del Santo, todos los 15 de mayo. La participación de vecinos y visitantes en la celebración de un día de campo está presidido por la hospitalidad y la fiesta, donde todo el mundo viene a la romería a disfrutar, unos se traen la tortilla de patata, otros se preparan una buena paella, que decir de las chuletas, todo lo que se tercie pues todo regado con un buen vino, entra a las mil maravillas. Todo se ameniza de colorido y música, de acuerdo a lo que se celebra con gran algarabía y disfrute de la chiquillería.

La Ermita está situada en el paraje de Las Laderas de El Boalo, en un entorno único y envidiable, rodeada de magníficos paisajes. Fue levantada esta Ermita gracias al trabajo de los vecinos de la localidad con mampostería de granito de la zona.

Romance a San Isidro Labrador

De los Reinos de los Cielos

un ángel se descolgó

y en este pueblo ha quedado, San Isidro Labrador.

Ya se marcha con los bueyes

a enderezar la mesana

que con su mano de santo

el trigo esparramaba.

El trigo ya lo ha sembrado

ahora le falta tapar,

él echa a andar a sus bueyes

y en la esquina se está.

 

Delante de San Isidro un hombre

se presentó y se puso de rodillas

porque Dios se lo mandó:

-Un favor vengo a pedirte

si me lo puedes hacer

mis hijos muertos de hambre

y hasta también mi mujer-

que me des un saco de trigo

para llevarlo a moler.

 

Un saco de trigo te doy

para que puedas comer

y hagas pan para tus hijos

y también pa’ tú mujer.

Y el santo se puso a considerar

qué fatigas pasa un padre

cuando en su casa no hay pan,

este hombre agradecido

al santo mil gracias dio

pues si no es por San Isidro,

que fue el que lo remedió

sus hijos se mueren de hambre

y no tienen salvación…

(Poesía de D. Agustín Esteban, El Boalo-Madrid)