El futuro Parque Nacional de Guadarrama tendrá una extensión de unas 40.000 hectáreas, según los cálculos de la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona. Una cifra algo inferior a la que propondrán Madrid y la Junta de Castilla y León al Consejo de la Red Parques Nacionales en su propuesta para la creación de esta figura estatal de protección de la naturaleza.
En el actual Plan de Ordenación de los Recursos Naturales de Guadarrama, la Comunidad de Madrid contempla la protección de 34.500 hectáreas como Parque Nacional. Por su parte, la vicepresidenta primera y consejera de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, María Jesús Ruiz Ruiz aún estudia junto a su equipo qué extensión proponer para la inclusión en el Parque Nacional, pero esta comunidad en otras ocasiones ha hablado de unas 11.500 hectáreas.
Así, en total serían unas 46.000 hectáreas las que propondrían las comunidades y unas 40.000 las que finalmente recibirían esta figura de máxima protección natural. Narbona explicó que habrá zonas que no puedan ser Parque Nacional por estar urbanizadas, pero que seguirán recibiendo otros tipos de protección. Hay que tener en cuenta que el PORN de Guadarrama de la Comunidad de Madrid cuenta con una extensión de 75.700 hectáreas y que el de la Junta tendrá unas 78.000. Los terrenos que no se incluyan dentro del Parque Nacional también estarán protegidos, en este caso con fórmulas regionales.
En cuanto a las fechas para que la sierra de Guadarrama sea Parque Nacional los cálculos más optimistas llevan ya a la próxima legislatura. La ministra aseguró durante la rueda de prensa posterior a una reunión mantenida por las tres partes este lunes que espera que el Consejo de la Red de Parques Nacionales haya recibido el proyecto conjunto de Madrid y la Junta de Castilla y León antes de que acabe la legislatura.
Para que el proyecto conjunto pueda llegar al Consejo, la Junta de Castilla y León deberá terminar su Plan de Ordenación de los Recursos Naturales de la sierra de Guadarrama, que prevé tener listo en el plazo de un mes y abrir después un periodo de exposición pública.
Por su parte la Comunidad de Madrid, está revisando su PORN, para adaptarlo a la nueva Ley de Parques Nacionales aprobada en abril de 2007. Además, ambas comunidades deberán mantener reuniones a dos bandas para concretar el área que propondrán definitivamente como Parque Natural.
Principales escollos.
La reunión de este lunes sirvió como toma de contacto entre las responsables de Medio Ambiente del Gobierno central, de Madrid y la Junta de Castilla y León tras las elecciones. En ella se retomaron las diferentes consideraciones de las administraciones sobre qué debe ser un Parque Nacional.
Los principales puntos de desacuerdo son los usos compatibles con esta figura de protección. Mientras que la Ley de Parques Nacionales no contempla los llamados usos tradicionales, como pesca, caza o explotación forestal, la Junta de Castilla y León asegura que los seguirá manteniendo, ya que, dice, son compatibles con la máxima protección del medio ambiente.
Este conflicto entre Ministerio y Junta no se ciñe sólo al futuro Parque Nacional de Guadarrama, sino que ambas administraciones también lo mantienen en los Picos de Europa, un lugar que goza de la protección de los parques nacionales, pero donde se siguen dando esos usos tradicionales. No obstante, Narbona dijo que trabajan con cierto margen y que preferiría que se diesen ciertos tipo de pesca a agresiones urbanísticas.
Narbona se mostró preocupada por el desarrollo urbanístico en el futuro Parque y en las zonas colindantes y recordó durante la rueda de prensa que ya indicó al anterior consejero de Medio Ambiente de la Comunidad que reforzara la protección del medio ambiente frente a la construcción en algunas zonas del PORN madrileño.
La consejera de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid, Beatriz Elorriaga, matizó que, aunque las 75.500 hectáreas del PORN no sean declaradas en su totalidad Parque Nacional, el resto también gozará de protección.