Aunque parezca extraño, el Monte Abantos se va a quedar fuera de los límites del futuro Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, según consta en el Plan de Ordenación de Recursos Naturales (PORN).
Más urbanizaciones. Entre los municipios incluidos en el futuro Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama se encuentran Rascafría, Manzanares el Real, Mataelpino y Miraflores. Sin embargo, la mayoría de los pueblos serranos se enmarcarán en las zonas de protección, algo que ya ha criticado Ecologistas en Acción, que ve en ello un futuro crecimiento urbanístico «incontrolado».
De momento, lo que nadie puede quitarle a Guadarrama es su riqueza natural. Sus montañas y valles son hábitat de especies en peligro de extinción como la cigüeña negra, el buitre negro, el aguila imperial, muchas más rapaces, nutrias, corzos y cabra montés.
El camino de la Sierra de Guadarrama hasta convertirse en parque nacional -sería el 15 de la Red Nacional porque el 14 lo va a ser Monfragüe-, todavía es largo. Una vez hecho publico el PORN de la zona madrileña queda conocer el PORN de la castellano-leonesa. Después hay que pasar un periodo de información pública.
Algunos ayuntamientos arrastran consigo desde hace años intentos de consumar una planificación para su municipio, como por ejemplo Collado-Mediano. Otros, sin embargo, como Moralzarzal, se han lanzado a una nueva planificación pocos años después de aprobada la anterior, en una carrera enloquecida por ganar más y más suelo urbanizable.
Hay municipios como Cercedilla o Guadarrama, con planes más antiguos, que buscan nuevos suelos urbanizables cuando todavía no han agotado ni mucho menos los suelos aptos para urbanizar. En los cuatro municipios del valle del Lozoya, por otra parte, el inicio de los Planes Generales de Ordenación Urbanística (PGOU) Lo preocupante, en todo caso, es que algunos de estos municipios, como Cercedilla o Moralzarzal no lo contemplan siquiera en su planificación su futura implicación con el Parque Nacional.
El PORN de la Sierra de Guadarrama en su vertiente madrileña prevé, un parque nacional de 35.000 hectáreas -tamaño medio- y otras 70.000 que corresponden a la zonas de protección (una especie de «abrigo» con los parques regionales del Lozoya y de la Cuenca Alta del Manzanares) y, también, a la denominada zona de transición.